Vecinos de Tui adelantan en coche paradas para tener plaza a las 7.40 horas
22 sep 2023 . Actualizado a las 16:33 h.«Hoy han sido siete las personas que se quedaron de puerta afuera porque el autobús ya estaba lleno en el centro de Tui y otras 19 en las seis paradas siguientes, dentro del municipio, y ayer fueron más de veinte. La situación es así de desesperante desde hace una semana», explica Manuel Antonio. Es uno de los afectados por una historia que se repite cada mañana. Coger el autobús que pasa a las 7.40 horas para llegar a Vigo a las 8.35 es una auténtica odisea, pero ni el madrugón asegura una plaza, así que los usuarios no solo se levantan antes sino que se las ingenian para poder llegar a paradas que están hasta a tres kilómetros de las suyas para adelantarse.
De la veintena de personas, entre estudiantes, trabajadores y vecinos que acudían a citas hospitalarias y que a esa hora esperaban el bus en la calle Ourense, siete tuvieron que quedarse fuera porque justo cuando iban a subirse se completó el aforo y la puerta se cerró en sus narices. El incordio y la impotencia eran visibles porque todos tenían citas ineludibles que una vez más se retrasaba o que, en algún caso, perdían.
«Desde que comenzó el curso no conseguí aún llegar a primera hora porque siempre se llena el bus y me quedo fuera y además, como no puedo aportar ningún justificante, mis profesores no saben si realmente el retraso es por falta de interés o por el autobús», advierte Arturo Vargas.
Para poder llegar al centro de Tui a esa hora y, al igual que María Teresa Arribada, tuvieron que coger a las 7.15 horas el de Monbus en Caldelas de Tui. Antes de que comenzara el curso escolar podían parar en Guillarei y esperar allí el de Lugove hacia Vigo, pero ahora han de llegar hasta el centro de Tui y aún así, una vez más ayer se quedaron de puertas afuera. Hasta hace dos años aún podían ir en tren desde Caldelas de Tui a Vigo, pero tampoco disponen ya de ese servicio.
«Tenemos que hacer un transbordo y esperar media hora en la parada para después quedarnos fuera», apunta Arturo que, haciendo cuentas, tarda dos horas en recorrer los 39 kilómetros que hay desde su casa hasta el CPR Daniel Castelao en el que estudia. En una situación similar está Safa Kalai, molesta no solo por haberse quedado sin poder subirse al autobús «sino por las formas».
La tensión es palpable en cuanto se aproximan las siete y veinte de la mañana, cuando las personas que están esperando el autobús intentan coger el mejor sitio en la acera. Ayer quedaron menos personas fuera, pero porque al igual que varias personas fueron desde Guillarei al centro de Tui en coches de familiares «porque en las siguientes paradas hasta O Porriño ya sabemos que no se va a poder subir», otros que hasta entonces subían en este punto han hecho lo mismo pero para coger el bus en la parada anterior, que está a 1 kilómetro aproximadamente de distancia, en la avenida de Portugal. «Tenemos que asegurarnos de que los jóvenes pueden llegar a clase», explica uno de los padres que trasladó a sus hijos a esta parada. Los del campus universitario tienen más suerte porque sí había plazas suficientes en el servicio de las 8.05, al que también subieron quienes quedaron atrás en el anterior e iban al hospital Álvaro Cunqueiro. La cita de Alberto y su madre era en el Meixoeiro, a las 8.30 y la perdieron. «Es una tremenda impotencia, está claro que hace falta un refuerzo a las 7.30 horas aunque esto también pasa muchas veces en Vigo», lamenta Alberto. María Teresa asegura que ya ha presentado dos reclamaciones en el Concello de Tui, «pero sin resultado porque nos dicen que el problema es de la concesionaria del servicio».