El mejor 25N, en Pasarón

PONTEVEDRA

RFEF | EUROPAPRESS

El título mundial y el cese del presidente de la Real Federación Española de Fútbol por «el piquito» y todo lo demás, logros inimaginables por la igualdad

27 nov 2023 . Actualizado a las 14:18 h.

El estadio de Pasarón acogerá este próximo viernes 1 de diciembre, con el partido España-Italia de la Women’s Nations League, el mejor homenaje posible que cabía, a mi juicio, para celebrar el Día internacional por la eliminación de la violencia contra las mujeres. Aunque vaya a ocurrir jornadas después del 25N. Pero no imagino mayores logros y mejores lecciones por la igualdad y contra la violencia de género que los alcanzados y ofrecidos por la selección española de fútbol en este 2023.

Constituye un honor para la ciudad recibir al equipo que, en agosto, con la pontevedresa Tere Abelleira como uno de sus estandartes, se proclamaron campeonas del mundo en Australia. Un hito histórico e inédito del deporte femenino en España. Que, además, empata con lo logrado en Sudáfrica en 2010 por la selección masculina. Pero, sobre todo, este grupo de deportistas ha establecido una conquista social que parecía imposible en la lucha por la igualdad al conseguir tornar unos hechos que pudieron haber ensombrecido aquella gesta deportiva, en una herramienta para consolidar la lucha contra la violencia de género, lo que desembocó en el cese del todopoderoso presidente de la RFEF. «El piquito» y todo lo demás que protagonizó el infausto Luis Rubiales.

Jugar, luchar y ganar

Apenas han transcurrido tres meses y medio de aquel 20 de agosto cuando el equipo español izó la copa de campeonas del mundo, materializando en un hecho histórico su lema de «jugar, luchar y ganar». Aunque pudiéramos suponer que teníamos un buen equipo, con Alexia Putellas elegida por dos años consecutivos como mejor jugadora del mundo, nuestras expectativas no eran tan altas. Pero, felizmente, se consiguió.

Después de aquel día, creo que todos tenemos la sensación de que, en apenas noventa y tantos días transcurridos, se ha sucedido un carrusel de acontecimientos impensables que todavía están muy frescos en la memoria colectiva. Por supuesto, la mayoría, más allá del fútbol. Son sensaciones que aún están muy a flor de piel, como seguramente vamos a comprobar a lo largo de estos próximos días, desde que el equipo nacional llegue a Pontevedra, sea recibido institucionalmente en el Pazo Provincial y hasta que se celebre el partido del viernes.

Desde luego lo que vamos a vivir en esta próxima semana, será algo muy diferente a los homenajes del verano, cuando en torno a Tere Abelleira celebramos varias veces en Pontevedra y en Poio, el título mundial. Aunque en las intervenciones de la mediocampista pontevedresa estuvo muy presente lo que sucedía en paralelo esos días. La tormenta que se desató en torno al «piquito», el abuso de Luis Rubiales sobre Jenni Hermoso y todo aquello que rodeó los excesos del anterior presidente de la Real Federación Española de Fútbol. La reacción tardó por las zozobras iniciales. Pero finalmente resultó ser un tsunami imparable protagonizado por un grupo de mujeres convencidas de sus razones que consolidaron en una posición de fuerza en aras de la igualdad que desató muchas consecuencias.

Expectación inusitada

Buena prueba de las altísimas expectativas del público pontevedrés y gallego para ver a las campeonas del mundo, se refleja en lo rápido que se agotaron las entradas que se pusieron a la venta, en línea. Ciertamente una parte muy escasa de las 8.000 localidades numeradas y de asiento que se pueden ocupar en Pasarón, debido a las restricciones de seguridad que la UEFA impone en estos partidos. Hay que tener en cuenta que la Federación Gallega ha repartido 6.000 localidades, por cupos de 60 entradas por club, para atender las peticiones de las diferentes entidades. Y es muy de entender ese procedimiento, pues la mayoría son equipos de base con niñas que desean ver, de cerca, a Aitana Bonmatí, Alexia Putellas, Jenni Hermoso y por supuestísimo, a Tere Abelleira, entre otras. Son sus ídolos y referentes deportivos. Los éxitos de ellas han sido el factor que multiplica hasta por cinco, el aumento de licencias femeninas en Galicia.

Pregúntense cuántas futuras estrellas del fútbol gallego y nacional saldrán de entre los millares de crías que estarán el viernes en las gradas de Pasarón. Las más afortunadas las verán contra las italianas. Porque otras muchas se conformarán con verlas en el entrenamiento del jueves 30 que sí será de libre acceso. En todo caso, va a ser un recuerdo imborrable para todas ellas y sus familias. Por cierto: ese entrenamiento abierto al público y gratuito tiene por intención aplacar el malestar con la venta de localidades para el partido que se despacharon en unos minutos. Y aunque las razones de la Federación puedan ser entendibles, les ha faltado claridad informativa y más pedagogía. Por tanto, hay que interpretar ese entreno a puerta abierta como un guiño rápido de las autoridades federativas, pero también de las instituciones, particularmente de la Diputación Provincial, patrocinador principal del partido con 200.000 euros. En este punto, resulta harto llamativo, por contraste, el desentendimiento del Concello de Pontevedra. Frente al clamoroso silencio de Miguel Fernández Lores, contrasta que Luis López, presidente de la Diputación, reivindicase la aportación de la institución provincial que justificó diciendo que si «Pasarón tuviese el triple de aforo, también se llenaría». No lo dudo.