Un portavoz radical

Pedro Armas
Pedro Armas A MEDIA VOZ

OPINIÓN

Eduardo Parra | EUROPAPRESS

14 dic 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

Feijoo nombra a Miguel Tellado portavoz, es decir, la persona autorizada para hablar en nombre y representación del PP. Justifica el nombramiento por su «trazabilidad parlamentaria desde hace varias legislaturas». Cierto. Vinculado al nacionalismo en su etapa estudiantil, licenciado en Ciencias Políticas, apenas trabajó fuera de la política; si acaso, en Radio Fene, cuando gobernaba el BNG. En cuanto cambió sus planteamientos políticos y vitales, el PP le facilitó la vida. Colocado en distintos gabinetes, puestos parlamentarios y orgánicos, demostró a la par sus dotes como tertuliano televisivo y tuitero agresivo.

Tellado entendió que la meritocracia pasaba por dedicarse a repetir uno tras otro los mantras contra los gobiernos progresistas de turno: España se rompe, Venezuela se impone, ETA sigue ahí, el socio-comunismo tiene sobre sus espaldas millones de muertos, los socialistas son matones de patio de colegio... En los últimos años, el factótum de todos los males, Pedro Sánchez, ese mentiroso compulsivo, ególatra, que viaja en Falcon cuando debiera salir del país en un maletero, le ha permitido focalizar su espíritu hipercrítico y su vehemencia. Para eso, Feijoo, el moderado, ha encargado a Tellado, el radical, la portavocía. Para eso y para que Abascal deje de ser el portavoz único de la derecha cabreada por el vergonzoso pacto con el independentismo, la desigualdad autonómico-fiscal, las leyes de género o la protección animalista.

Aunque se declara servidor leal de Feijoo, Tellado tiene capacidad para más. Curtido en jefaturas de gabinetes de prensa, se mirará en el espejo de Miguel Ángel Rodríguez, asesor áureo de Aznar y Ayuso, aunque nunca comparará a sus jefes, porque son «incomparables». En su función parlamentaria prestará más atención a la forma que al fondo, al corte de telediario desde la tribuna, a la rueda de prensa posterior y al canutazo de pasillo que al contenido de los debates o al recorrido de las leyes. Incluso tomará nota de las estrategias de Jason Miller, el primer asesor de Trump, porque, de hecho, a Tellado le tira más el trumpismo que el liberalismo. Hasta podría cambiarse el nombre por el de Mick Roof.