El Tribunal Supremo anula el nombramiento de Dolores Delgado como fiscal de Memoria Democrática
Los puestos del mercado de A Magdalena confían en que la venta mejore en agosto
03 ago 2021 . Actualizado a las 22:07 h.Los viernes y los sábados son los días de mayor afluencia en el mercado de A Magdalena. Los clientes acuden a los puestos en busca de producto fresco y de temporada, ya sea pescado, lácteo, fruta, carne o verdura. Cualquier día de agosto es posible ver familias enteras de otras partes de España en la plaza -especialmente les atrae la pescadería-. Compran marisco y pescado, como la familia de Rafael y Carmen y sus dos hijos, que viene desde Alicante cada verano en busca de temperaturas más suaves y producto local, sobre todo percebe y lubina. Dicen que «las cosas allí son mucho más caras y aquí todo es local, garantizado».
Aún así, los vendedores coinciden en que la compra es menos cuantiosa que otros años y que los turistas son menos, aunque hay variaciones entre unos puestos y otros. En su pescadería, Nico achaca esta bajada del consumo a la pandemia, y además hace un apunte muy interesante: que las personas mayores van al mercado cada mañana como forma de reunión. Este año, sin embargo, los mayores temen mucho al covid y algunos no se atreven siquiera a salir de casa. Puede ver de primera mano las diferencias con años anteriores: «Teño traído cincuenta quilos de percebe e nun sábado se ventilaban, este ano con cincuenta quilos botas tres días ou máis».
En la frutería Begoña destacan que el producto más demandado esta temporada es, sin lugar a dudas, el tomate: «Este ano veñen moitas variedades, e as máis distintas, como o azul ou o negro de Santiago, están caras para a tempada». También notan la influencia del turismo, si bien no es comparable con la de años previos: «O turista compra, aínda que sobre todo mira. Gústalle moito o produto de por aquí, da terra».
Sonia lleva en É con til, un puesto de producción propia y libre de químicos, que cultiva en dos huertos de Santa Mariña do Monte y Sedes para después vender en la plaza de abastos. Explica que el covid, sumado a la climatología de este año, están condicionando la producción y la venta, pero procura quedarse con lo positivo y señala que gente de todas las edades hace un consumo cada vez más consciente: «Os maiores fíxanse polo ollo e a xente nova ven buscando produto ecolóxico por saúde e cando proba sempre repite». Cuenta con ilusión cómo los niños prefieren sus tomates cherry antes que una chocolatina. El producto que más busca el cliente este verano, efectivamente, sigue siendo el tomate.
Por último, Antonio, en su carnicería, explica que este verano hay menos churrascadas y que eso se nota, así como constata que «a cesta é máis escasa e ademais as reunións, de habelas, non son como antes. Xa non se fan patróns nin festas». Además, dice que los turistas llegan con cuentagotas. De todos modos, insiste en que «estamos aínda a principios de agosto e hai que esperar a ver como se desenvolve».