La cesta de la compra sigue menguando en un primer semestre sin tregua en los precios

La Voz REDACCIÓN / EFE

ECONOMÍA

_Eduardo Oyana | EFE

La rebaja del IVA de los alimentos básicos le ha costado al Estado 626 millones de euros

05 ago 2023 . Actualizado a las 12:55 h.

Mientras que la inflación generalizada se mantiene en el 2,3% -muy cerca del objetivo estable del 2%-, los precios que pagan los españoles por llenar la nevera y la despensa siguen aumentado, lo que deriva en una caída del volumen de compra de hasta el 2,6% en el caso de los alimentos y del 1,1% en el de las bebidas durante el primer semestre.

Eso indica el informe semestral de la consultora Circana, que aglutina el gasto de los españoles en supermercados e hipermercados durante los seis primeros meses del año, en los que la marca blanca siguió ganando adeptos en todos los canales y la compra a golpe de clic se debilitó.

A la espera del dato detallado del incremento de precios de los alimentos y bebidas no alcohólicas que ofrecerá próximamente el Instituto Nacional de Estadística (INE), estas son las cinco claves del consumo de los españoles en la primera mitad del año.

  • La factura en el súper: 42.755 millones de euros. Las familias españolas gastaron en el supermercado 42.755 millones de euros en bienes de consumo (alimentos e higiene) de alta rotación, lo que se conoce como «gran consumo». Se trata de un 10,6% más que en el mismo período del 2022 y se debe, exclusivamente, al incremento de precios registrado el 11,6%, de acuerdo con los datos de la consultora; el peso (volumen) de estos carros de la compra se contrajo un 1%.
  • Azúcar, leche y aceite, lo que más se encarece. Dentro del abastecimiento familiar, la alimentación es la que registra un mayor incremento de precios, hasta un 14,3% más; es también donde más han recortado los consumidores, pues la caída en volumen fue del 2,6%. Y en la clasificación de las familias que más se encarecen se encuentran el azúcar (+ 50,7%), la leche (+ 48,7% ) y el aceite de oliva (+32,4%).
  • Secciones: los frescos y las bebidas. Mantener una alimentación saludable es el objetivo de muchos consumidores; estos patrones, como es el caso de la dieta mediterránea, se componen principalmente de los alimentos frescos en los que los españoles se dejaron 12.930 millones de euros en seis meses. Es un 9,3% más presupuesto que hace un año, ya que a pesar de haber comprado un 1,3% menos, el precio medio se incrementó un 10,6%. La sección de bebidas también ha subido de precio, un 12% en esta ocasión, si bien su importancia dentro de la cesta de la compra solo ha caído un 1,1%. Dentro del gran consumo, los productos con mayor incremento de consumo no son alimentarios, pues se trata de productos de cosmética facial, decorativa o corporales.
  • La marca blanca suma y sigue. Para mirar el bolsillo, la marca blanca o de distribuidor se ha convertido en un gran aliado; de hecho, aunque sus precios también han aumentado -casi un 14% en un semestre- sigue ganando espacio en los hogares de los españoles y en todos los departamentos. Los precios de las marcas de fabricantes, atosigados igualmente por el incremento de los costes de producción, solo se elevaron un 11%.
  • Los españoles y los supermercados. La estructura de la distribución comercial en España hace que el supermercado sea la opción más elegida por los consumidores. La evolución del consumo online, con una evolución en entredicho después del bum en la pandemia, representa ahora el 2,6% del total de las compras de gran consumo; es un 6,7% más que hace un año en valor, pero el volumen cae más que la media, un 2,5%.

¿Qué hay de la rebaja del IVA de los alimentos básicos? Aunque se aprobó para paliar los efectos de la inflación, no ha impedido que estos se siguieran inflando y ha supuesto una pérdida de recaudación de 626 millones de euros en el primer semestre del año, según el informe mensual de recaudación de junio publicado esta semana por la Agencia Tributaria.

Desde el 1 de enero el tipo de IVA de los alimentos básicos -un grupo en el que entran frutas, verduras, leche o pan- es cero, en lugar del superreducido del 4%, mientras que los de los aceites y pastas es del 5%, en lugar del 10%, una medida que se extenderá hasta final de año. La decisión de prorrogar esta bonificación del IVA más allá del 30 de junio se adoptó ante la persistencia de la inflación de los alimentos, que en junio todavía superaba el 10% interanual debido a las fuertes alzas de productos como el azúcar (45%) o el aceite de oliva (31%).

También se mantiene vigente hasta final de año la rebaja del IVA del gas -que tributa a un tipo del 5%, en lugar del 21% habitual-, lo que ha supuesto una merma de recaudación de 136 millones de euros en la primera mitad del 2023. Sin embargo, la Agencia Tributaria ya no contabiliza el impacto recaudatorio de la bonificación de los impuestos eléctricos -IVA, impuesto de generación e impuesto especial de electricidad, todos prorrogados hasta final de año- porque llevan en vigor más de un año y, por lo tanto, no afectan a la comparación interanual.